"La libertad, Sancho, es uno de los más preciosos dones que a los hombres dieron los cielos;... por la libertad, así como por la honra, se puede y debe aventurar la vida”. (Miguel de Cervantes).

El dolor del alma

    
      Tengo un dolor que surge de lo más profundo de mi ser, de mi interior, del abismo de mis entrañas, del fuego más helador de mi conciencia. Me duele el alma inexistente durante años, durante décadas.
      Tal vez estaba aislada en una parte minúscula de mi cabeza, tal vez en mi corazón. Tal vez en lo aprendido en mi cultura, tal vez en la memoria de mis mayores.
      Arde y quema como el hielo más acerbo, como el puñal más artero, como el cristal más afilado cuando rasga y descarna toda nuestra miseria y muestra que no somos nada, que nada valemos.
      Me duele el alma del ruido ensordecedor de panderetas, de medias tintas, de paños calientes, de tapar la sangre arrebatada con tiritas de trapo, de pensar que somos tontos y tratarnos como tales.
      Me duele el alma que creía insensible, que creía infundada, de asimilar los muertos como una simple estadística, como un fila de Excel, como un círculo de tiza, como una mentira vana, y reducirlo todo al ascenso de una curva o a una perorata laxa.
      Me duele el alma por los que nos abandona, a los que apenas puedo mostrar mi duelo ni sé su paradero, a quienes los trasladan y cuidaron, a mis semejantes.
      Me duele el alma tanto que no me deja pensar, que no me deja reír, que no me deja leer, que no me deja evadir mi cuerpo, que clava su dolor en mi corazón.
      Y busco la huida y busco el escape. De la realidad. Pensando en historias sencillas, en acciones pasajeras, en pensamientos fatuos, que, como mínimo, me hagan olvidar a los charlatanes y a los taciturnos.
      Mi alma implora, tal vez reza, que la cuenta pare, que calle el profeta de la curva y hablen los que curan y prediquen los que sanen.
      ¿Dónde están? Los necesito, los llamo, los reclamo desde una sala vacía, desde un hueco de mi vientre, desde lo más profundo de mi memoria como humano aislado, gimiente e insomne.
      Mi alma es un páramo doliente. Ya no hay nieblas, ya no hay sueños, ya no hay quimeras. Todo es triste, inhumano. Un solar desvencijado, una meseta yerma, un dolor de muchos años.
      Aquí estoy, nada celebro, solamente espero, solamente deseo, solamente algo: un resquicio, una salida, una llama iluminando la aurora, un calor en la alborada.
      Me duele el alma esperando. Me duele el mal paralizante, me duele esta ponzoña infrahumana que
destruye y me descarna.

El tormento, el éxtasis y la decadencia

    
      Había escrito unas letras sobre El tormento y el éxtasis1 (The agony and the ecstasy, 1965) de Carol Reed, que había visto otra vez con la pandemia actual, huyendo de la realidad, buscando en mi cultura europea y mediterránea un lugar ajeno a la pestilencia mortífera del virus que me impide comprender que la muerte de más de 1.300 sea presentada como la subida de una curva y no como la desgracia nacional que alguien, o algunos, deberán justificar donde corresponda.
      Entre tanto, no dejaba de recordar otra película, La gran belleza2 (La grande bellezza, 2013) de Paolo Sorrentino. Mientras escribía sobre el documental del inicio de la película sobre la vida de Migue Ángel, iba aderezando esa visión con el encuadre o contexto histórico del momento sobre los poderes políticos que luchaban en la Italia de comienzos del siglo XVI, los intentos de afianzar el carácter absoluto de las nuevas monarquías, de cuando el papado, aunque había perdido influencia política, se mantenía como árbitro de la política europea en muchos aspectos aunque se vislumbraba, por las críticas, la reforma en la distancia; enmarcaba el panorama con la intervención de las potencias europeas en Italia, en especial franceses y españoles. Y mi cabeza acababa, terminaba con el recuerdo de La gran belleza, y, su antecedente, La dolce vita3 (1960) de Federico Fellini.
      La película de Carol Reed recreaba el nacimiento y gestación de la cultura y el poder europeo moderno a través del arte con la ayuda de mecenas como los Médici y Julio II, que consiguieron concitar y descubrir a personalidades tan extraordinarias para nuestra civilización como Bramante, Miguel Ángel y Rafael Sanzio. Europa estaba en plena expansión en la era de los descubrimientos geográficos, los inicios de la revolución científica, la búsqueda de nuevos mercados comerciales, el desarrollo de los estados nacionales, y el gusto por la fama, el prestigio y la conquista.
      Pero yo me acordaba de las películas de Fellini y Sorrentino porque me trasladaban en qué estado se encontraba, de forma premonitoria, ese desarrollo cultural, económico, político y artístico de Europa tras cinco siglos de influencia. Y me dejaba el sabor amargo de la decadencia. La película de Sorrentino como la de Fellini profetizaban la pérdida de pujanza de lo europeo. Muy turístico, sí, y muy bello también. Sin embargo, decadente. Estamos viviendo de las rentas culturales tras siglos de pujanza.
      Tras la segunda guerra mundial, una Europa destruida intentó forjar un poder en el mundo mediante la creación de la Unión Europea superando los nacionalismos, consciente de su debilidad, orgullosa de su legado, y, obviamente, temerosa de la competencia.
      Creó un estado de bienestar envidiable con una zona de vida donde los servicios públicos atendían las necesidades de sus ciudadanos. Algo que era deseado por los países de otras geografías políticas del planeta. El tejido industrial y el poder mercantil se fue deslocalizando con el tiempo, traspasando su producción de forma mayoritaria a la cuenca oceánica del Pacífico y el Índico convirtiendo esta parte del mundo en el corazón de la economía, la ciencia y el progreso del mundo.
      Esta traslación geográfica del poder político había oscilado a lo largo de la historia desde el nacimiento de las civilizaciones orientales entre Mesopotamia y el Nilo, el mar Mediterráneo, después, y, a partir del siglo XVII, el Océano Atlántico.
      El poder de las naciones, el absolutismo, y el posterior auge de los Estados liberales había dotado a la vieja Europa de una influencia mundial que se quebró tras la aparición en el siglo XX de los Estados Unidos, Japón y la emergencia de China en sus últimos veinte años.   Algunos de estos países no tienen el bienestar social europeo, ni sus derechos políticos y sociales, ni el prestigio y fama de su cultura, pero han ido minorando el poder e influencia de una antigua forma de vida. La lucha por los avances científicos y técnicos, que, antes, monopolizaban los países de la Unión Europea, son compartidos, o poseídos, por otras zonas del mundo.
      El avance de los Estados Unidos fue asumido de manera más natural por la intervención salvadora en dos guerras fratricidas europeas, que adquirieron carácter mundial, porque los salvadores eran descendientes de los combatientes, que, en la segunda mitad del siglo XIX, se había desarrollado en la tierra conquistada por sus padres. Por el contrario, la competencia asiática les descolocó.
      Tenían una cultura milenaria que no era tan conocida ni tan vendida y prestigiada como la europea. No tenían los derechos políticos, sociales y económicos que habían pertrechado y fortalecido Europa durante los últimos doscientos años a través de la toma de conciencia de clase y el avance democrático. Pero ellos eran incansables, consistentes, comprometidos y adaptables. Su capacidad de trabajo, su avance científico, su capacidad de resiliencia, la admisión de sus posibilidades, y la emulación de todo lo que les rodeaba quebró el concepto de bienestar europeo a partir de la crisis financiera e inmobiliaria de 2007-2008, que ellos soportaron mejor.
      Ahora que estamos en medio la cuarentena de corona-virus, que solicitamos material de protección de China, o a sus empresas, que los países más afectados en la segunda quince de marzo de 2020 son las potencias culturales, políticas y económicas dominantes en los principios del siglo XVI (Italia, España y Francia), recuerdo de forma premonitoria el aire decadente de La dolce vita y La grande bellezza donde la despreocupación, lo superficial y lo evanescente emergía por todos lados en medio del recuerdo de lo conseguido por la civilización europea durante siglos o milenios.
      Cuando se produjo la epidemia de peste de mediados del siglo XIV, Boccaccio escribió El Decamerón4 donde relataba como unos jóvenes abandonaban la ciudad de Florencia y se reunían en una villa del campo huyendo de un virus mortífero del que se olvidaban con el deleite de cuentos agradables a los sentidos. Sé que lo primero, el desplazamiento, está prohibido porque los virus no conocen fronteras, pero lo segundo, leer o contar cuentos agradables a los sentidos, es un ejemplo de lo que brinda una cultura como la europea y sus creadores para evadirnos, de forma momentánea y eterna, de tanta muerte y desolación.
#Quédate en casa.
Colas para entrar en los Museos Vaticanos, fuente propia.
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Capitanes Intrépidos (1937)

    
     El señorito Harvey es maleducado y consentido. Su padre está siempre ocupado en sus negocios y se despreocupa de su educación que fía a los buenos colegios, el servicio doméstico y la amplitud en la paga mensual. Harvey es amoral, creído y soberbio con el prójimo, al que utiliza para sus fines egoístas, y demostrar su preeminencia social y económica sobre los demás.

      Tras su penúltima irresponsabilidad, su padre se lo lleva en un viaje trasatlántico en una cómoda embarcación donde el menor no deja de avasallar a los demás. El ejercicio de prepotencia termina quemando al prepotente que cae a las frías aguas oceánicas donde es rescatado por un marinero portugués enrolado en un pesquero de bacalao de Gloucester.
      La falta de empatía emocional de Harvey choca contra la dura vida del pesquero de altura donde todo está sometido a una rutina, un orden y un ejercicio de responsabilidad compartida entre todos sus tripulantes.   Durante los tres meses que dura la campaña del pesquero asistirá a un mundo desconocido donde se forjará un nuevo espíritu basado en el esfuerzo, el compañerismo y la solidaridad. Y, sobre todo, en apreciar el valor de las cosas sencillas, su servicio y utilidad. Que es necesario para tomar la sopa que ayude a tirar la basura de los desperdicios del barco, y que lo debe hacer conociendo la dirección del viento para que no le devuelva las tripas fermentadas de la basura.
      Harvey necesitaba cariño, ese que él no demostraba hacia ninguno de sus semejantes, porque lo desconocía y porque pensaba que se compraba todo con unas monedas. Aprende que existe sin más. Y sin más coste que la reciprocidad emocional y el respeto hacia los demás.
      Esa labor emocional deberá ser comprendida también por su padre, que, al ver como Harvey se ha transformado con la vida en el pesquero, teme perder el único cariño familiar que tenía, su hijo. Es una formación y aprendizaje compartido. Moralizante. Como todas las historias primigenias, como todos los caminos originales. Con cierta predestinación dentro del claro instinto reformador.

      “Capitanes intrépidos” fue dirigida por Victor Fleming en 19371 adaptando la novela homónima de Rudyard Kipling2. Manuel rescata a un peculiar “Jonás” al que enseña a pescar al volantín con respeto y responsabilidad. Harvey fue interpretado por la estrella infantil Freddie Bartholomew, y Manuel, el pescador preceptor, por Spencer Tracy, oscar al mejor actor por este papel. En el reparto, entre otros, destacan Lionel Barrymore (capitán del pesquero), Melvyn Douglas (padre), Mickey Rooney (hijo del capitán) y John Carradine (pescador). Las escenas cotidianas del pesquero son presentadas casi como un documental. El aprendizaje, el compañerismo y la forja de la responsabilidad es relatado como algo natural de la escuela que representa la vida. Manuel es un docente atípico, distinto al Aristóteles de Alejando Magno, o al Guillermo de Baskerville de Adso en “El nombre de la rosa”. Manuel es un preceptor de espíritu, de moralidad, compañerismo y valoración de los semejantes. Con la pesca, con sus artes, rescata al náufrago 'pescadito' de las procelosas aguas de la insensibilidad y le enseña a navegar por el mundo.


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2KIPLING, R.: Capitanes Intrépidos. Publicada en 1896 en época victoriana. Hay múltiples ediciones. Anaya S. A. y Círculo de Lectores. Barcelona. 1999. 216 páginas. Selección de Luis Alberto de Cuenca.

La decisión de Flavia

    Madeleine Carroll fue una magnifica actriz que en 1937 interpretó a la princesa Flavia en “El prisionero de Zenda”i, basada en la novela del mismo nombre de Anthony Hopeii, editada muchas veces, y adaptada al cine en varias ocasiones. Para mi, la versión de 1937 es mejor que la adaptación de 1952 protagonizada por Stewart Granger, Deborah Kerr y James Mason y dirigida por Richard Thorpe. Las dos “Flavias” de estas películas tenían en común su calidad interpretativa, su indudable atractivo, y el gusto por la costa malagueña española.
 
      La adaptación cinematográfica de 1937 fue dirigida por John Cromwell, y producida por David O. Selznick, uno de los grandes gracias a títulos como “Lo que el viento se llevó”o “Rebecca”. El magnífico reparto de 1937 incluía a Ronald Colman, C. Aubrey Smith, Douglas Faibanks Jr, Raymond Massey y Mary Astor.
      La princesa Flavia había sido educada desde su infancia para acompañar en el poder a su primo Rudolf. Una esmerada educación, unos modales principescos, unos ademanes exquisitos la convierten en el prototipo de princesa detentadora del poder político y social e imagen de un país. No quiere a su primo. Le detesta. Por dipsómano, pero, sobre todo, por que no asume sus obligaciones políticas, por su falta de resolución y respeto a la institución del país que va a gobernar. Todo cambia el día de la coronación. Por circunstancias que no cuento para quien no haya leído la novela o visto la película, un primo suyo, de parecido extraordinario, suplanta al rey y terminan enamorados el suplantador y la princesa. Es la pugna entre participar en la vida política, ejercer el poder o ser una ciudadana que busca la descansada vida huyendo del mundanal ruido y sigue la escondida senda que versó Fray Luis, disfrutando de un amor sin las limitaciones del personaje público. La puna entre la fama o el disfrute de la vida plena.
      Flavia lucha entre la obligación para su país, su clase, su educación, y el amor descubierto, del que disfruta unos días, como un bien escaso. No puede tener ambas cosas. Tiene que decidir. Ha sido educada para tomar decisiones, para ocupar el poder. Termina optando por su ejercicio en detrimento del amor, lo nuevo y lo desconocido. Lo inesperado y lo deseado. Al final gana la razón de estado, el calor del poder, la fama. Tiene libertad de elección porque puede decidir perder la libertad de amar en favor del ejercicio del poder. A partir de ese momento, tendrá capacidad para decidir sobre la vida de los demás, de los ciudadanos o súbditos de su reino pero ya no podrá disponer de su vida como quiera. Y su papel será dependiente de las decisiones del rey. Poder, pero un poder menor.
Fray Luis de León decía que la escondida senda solo había sido elegida por los pocos sabios que en el mundo han sidoiii.
      En estos días, dominados por la alarma sanitaria del coronavirus, veo a todos los que ocupan el poder: alcaldes, presidentes de comunidad, presidentes de gobierno, líderes parlamentarios. No parecen libres. No sé sí menos que los que estamos recluidos en nuestras casas disfrutando de películas clásicas, novelas de aventuras y papel higiénico.
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iiHOPE, A.: El prisionero de Zenda. Colección Flecha Negra coordinada por Luis Alberto de Cuenca para Cículo de lectores. Barcelona. 1998. 189 páginas.
iiiFRAY LUIS DE LEÓN: Canción de la vida solitaria. Poema escogido de la antología Paraiso Cerrado, selección y edición de José María MICO y Jaime SILES. Galaxia Gutenberg y Círculo de lectores. Barcelona. 2003. Páginas 124-127

Fuentes de Información sobre Coronavirus por David Sánchez Alonso

Coronavirus in Wikipedia by language  visualized by Felipe Hoffa
      Por su interés, se reproduce las fuentes de información sobre coronavirus facilitada por David Sánchez Alonso, quien me ha invitado a divulgarla, en momentos de confusión informativa, cuando los bulos viajan a más velocidad que el propio contagio. Esta información ha sido facilitada en el grupo de LinkedIn de periodismo científico (https://www.linkedin.com/groups/1791695/).
 

   
FUENTES:
https://www.linkedin.com/pulse/fuentes-de-informaci%25C3%25B3n-sobre-el-coronavirus-covid-19-sanchez-alonso

Información actualizada de organismos oficiales

  1. Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias Sanitarias (CCAES) del Ministerio de Sanidad de España
  2. Novel Coronavirus (2019-nCoV) situation reports WHO
  3. European Centre for Disease Prevention and Control
  4. Coronavirus Disease 2019 (COVID-19) Centers for Disease Contol and Prevention CDC
  5. European Comision - Public Health - 2019-nCoV

 

Mapas de seguimiento en tiempo real

  1. Seguimiento de incidencia 2019-nCoV de la John Hopkins
  2. Mapa de riesgo de propagación del Coronavirus COVID-19 por contagio comunitario en España
  3. Geographic distribution of COVID-19 in the EU/EEA and the UK
  4. Coronavirus Googlemaps
  5. Mapping the Coronavirus Outbreak Across the World (Bloomberg)

    Fuentes de literatura científica

  6. Cell Press Coronavirus Resource Hub
  7. The Lancet 2019-nCoV Resource Centre
  8. Novel coronavirus (Sars-Cov 2) Institute Pasteur
  9. Novel Coronavirus Information Center Elsevier
  10. PubMed COVID19 o SARSCov2
  11. Pre-prints sobre 2019-nCoV en bioRxiv
  12. Pre-prints sobre 2019-nCoV en medRxiv

    Información de agencias y medios

  13. Servicio de Información y Noticias Científicas SINC
  14. Materia-El País Noticias sobre el Coronavirus
  15. ElDiario.es Noticias sobre el Coronavirus
  16. Redacción Médica - noticias sobre el Coronavirus
  17. New York Times - Coronavirus
  18. Agencia EFE
  19. Coronavirus Outbreack BBC
  20. Euronews Coronavirus
  21. Reuters Coronavirus
  22. CNN Coronavirus
  23. Kyodo News Coronavirus

    Fact-checking (prevención de bulos y noticias falsas)

  24. Documentados por el servicio de fact-checking de "Maldita Ciencia"
  25. Documentados por el servicio de fact-checking de Newtral
  26. Documentados por el servicio de fact-cheking de "Salud sin bulos"

    Otras fuentes de información en LinkedIn

  27. Actualizaciones de los editores de LinkedIn
  28. Grupo LinkedIn de "Comunicación y divulgación científica"
  29. Asociación Española para el Avance de la Ciencia AEAC
  30. Hay que agradecer el trabajo de todos los investigadores, comunicadores y divulgadores de ciencia que velan por mantenernos seguros, prevenidos y prudentes. Si conoces otras fuentes fiables las puedes aportar en los comentarios. Gracias. Fuentes incorporadas con posterioridad: 
  31.  Con fecha 27 de marzo de 2020 se agrega por Blas Maeso Ruiz-Escribano el enlace sobre el punto de vista geopolítico que ofrece el Real Instituto Elcano: https://lnkd.in/dA52ZtC
  32. Con fecha 27 de marzo de 2020 se agrega por Blas Maeso Ruiz-Escribano el enlace sobre la visión estadística de coronavirus covid 19:  https://es.statista.com/
  33. 29 de marzo de 2020, actualización de Blas Maeso Ruiz-Escribano, la fundación Alzheimer España informa de la pandemia en los enfermos de Alzheimer y su tratamiento médico y ético: http://www.alzfae.org/fundacion/1152/el-comite-nacional-de-bioetica-cuestiona-con-dureza-directrices-de-sociedades-cientificas-que-marginan-de-la-asistencia-sanitaria-a-mayores-y-con-alzheimer-enfermos-por-coronavirus
  34. 29 de marzo de 2020, actualizado por Blas Maeso Ruiz-Escribano. El portal de noticias hispano italiano está informando del efecto de la pandemia de coronavirus en Italia y España: https://www.itagnol.com/

La lucha por la vida

    
      ¡No lo coge! ¿Qué estará haciendo?... ¡No puedo andar! ¡Mis huesos! ¡Cómo he degenerado! Dicen que tengo estenosis del conducto raquídeo. Que es inoperable. Estoy atada a un cuerpo ingobernable.
      Al menos tengo la cabeza despejada. Me han tenido en penumbra, durante meses, hasta controlar los medicamentos; soy dependiente, soy luchadora. En parte es culpa mía. En parte por desidia médica. Contestaban siempre igual: ¿qué espera con su edad? Y con mi enfermedad, y con la de mi esposo... No han sabido regular mi dosis de calmante, ni marcar la pauta de los medicamentos que debía seguir tomando hasta que fui al neurólogo. Estoy inválida, casi me dejan obnubilada o tonta. Desperté cuando se acertó con la dosis de Targin, para soportar los dolores, y ahora me veo postrada en el sillón hasta que llegue una nueva silla de ruedas. Me he quedado inmóvil poco a poco. No sé cómo he aguantado. Esa fuerza de voluntad ante el deterioro continuado que sufre mi cuerpo no sé de dónde viene. Es un calvario solo soportable por los mundos a los que me transporta la lectura.
      No es por presumir, pero soy, era, una mujer muy bien plantada, enérgica, resolutiva. Antes del matrimonio, cuando trabajaba de telefonista, tuve mis inquietudes, me gustaba leer. Ahora me encuentro inmóvil y necesitada. Una mujer fuerte a la que ha doblegado el peso de la vida; una vida salvada por un solo deseo. Por un placer. Leer. Cincuenta años antes no pude. Todo era distinto. Ahora estoy sola. Un trasto inútil y molesto.
      Quiero leer, quiero conversar, aprender. Vivir. El móvil solo es un refugio donde contactar con los que no puedo ver, visitar, para los que no vienen a verme tanto como deseo. ¡Con ochenta años rogando que vengan...!
      Ya contesta. Siempre está ocupado. No quiero molestarlo. ¿Podrá ir a buscarme el libro? Es mi hijo, le gusta la lectura, lo comprenderá... ¿Por qué no? Dice que está terminando y preparando lo de mañana. Que estará de guardia conmigo toda la noche. ¡Soy su madre!¿Y cuándo él era un niño? El libro que me ha dejado tiene la letra muy pequeña; me está gustando, pero me tengo que esforzar mucho. La letra tan chica....puf... ¡Vaya con don Fermín y La Regenta! Madame Bovary me gustó mucho. ¿Irá sobre lo mismo? Compraba libros de bolsillo con sus ahorros. Me pregunta sí me gusta Clarín, ¿cómo no me va a gustar? Conforme me he quedado sin movilidad leo más. No sabe o no se da cuenta que es mi refugio. No quiero morir, quiero libros. Tengo que apuntar los libros que he leído...En mi memoria hay recuerdos de todos, de diferentes personas, de diferentes momentos...Con los libros he ganado nuevas vidas. Soy yo en otro cuerpo, en otras vidas, por las que dejo de ser invalida. Creo, sé, que moriré pronto, pero quiero hacerlo leyendo, aprendiendo, ocupada.
      Que no le diga que me muero, ¡sí es ley de vida! Lo que no soportaría es que muriese uno de ellos antes que yo. Me dice que tengo fuerza de voluntad. ¡Ojalá!¡Una heroína! ¡Ja, ja, ja!. ¡Eso dice!
     Me cambia de tema; siempre lo hace. Quiere saber qué libro me ha gustado más. Una evasión, tal vez una elusión; eso es este placer para mí. Guardo recuerdos de personajes, autores, y situaciones. En mi memoria están los primeros episodios nacionales de Galdós con Gabriel e Inés, el tuerto general Kutuzov de Guerra y Paz, los habitantes del Madrid de La Colmena, Long John Silver de la isla del Tesoro, las sentencias de Sancho Panza, los amores de Sandokan y Mariana, los de Robin y Marian, la hija del capitán de Pushkin, Diego Alatriste y sus andanzas, un Fabrizio despistado en la batalla de la Cartuja de Parma...Y, también, lo que cuesta el amor en los tiempos del cólera, y lo que le ocurre a Urania en la fiesta del chivo...Me interrumpe... ¡Calla un momento! ¿No se da cuenta qué todos me hacen olvidar la realidad, vivir otro mundo, alienar este sufrimiento? ¿Qué si me he dado cuenta que ya no tomo tantos medicamentos? Sí, aunque estoy atada a un potro de tortura en forma de silla.
      Para la ansiedad hubo un tiempo que me recetaron, que recetaban a todo el mundo, orfidal. ¡Ay! Le he tenido que preguntar dos veces por la trama de La Regenta. Divagamos...Le digo que el ambiente social es opresivo en la ciudad. ¡Cuéntamelo! Dice que no me va a revelar el final. ¡Pues ya lo sé! Lo hay. Y que es verdad. Que he acertado, que el ambiente social es protagonista. Me gusta que me de coba. Que qué quiero para cenar. Tostadas de pan con tomate y requesón. Como siempre. No sé por qué pregunta.
       
     Mientras ceno mis tostadas, o sus tostadas, con tomate y requesón, observo la ruina de mi cuerpo. ¿Seré un estorbo? Me agarró a un afán nacido en mi cabeza, que es el único torreón que queda en pie. Quiero luchar por sentirme viva, por aprender lo que antes no pude, por estar pendiente de lo que ocurre a mi alrededor. Hasta el final.

      ¡Me muero! Ya estoy muerta, es cierto. En mi penúltimo ingreso hospitalario terminé agotada. Leí muy poco. Dependía de una máquina de oxígeno, de los calmantes. Cuando me dieron el alta sabía que volvería otra vez, que sería el último viaje. El cuerpo me ha abandonado de forma definitiva y un dulce sopor ha cerrado mis ojos. Estoy velada hasta mi entierro por Gabriel, Inés, Kutuzov, John Silver, La Regenta, Robin y Marian, Fabrizio, Alatriste, Urania, Sancho y Alonso Quijano...Todos ellos lloran mi pérdida. Como la de una #heroína que les quiso leer siempre. Durante muchos años. Hasta el final. 
 

El despertar, Henry Mayer, Puck, 1915



      El despertar, the awakening,  es un mapa alegórico que muestra el avance espacial del voto sin discriminación de sexo, el voto femenino, a través de la geografía de los Estados Unidos. Se distinguen tres planos compositivos que están relacionados:
     En primer lugar, en el suelo, el mapa físico político de los Estados Unidos, incompleto, en el que solo se indica los estados que han aprobado el voto femenino.
      En segundo lugar, la estatua de Libertas, la libertad, iluminando el camino, con paso firme, sobre los estados que, a modo de baldosas, mantienen la figura erguida de la estatua. La toga dorada, que no amarilla1, con la caída de ropajes de estatuaria clásica, sin embargo, se vuela para mostrar el texto alusivo al motivo de la carta persuasiva: “Votes for women”2. En el mapa físico se distribuyen los estados que han ido aprobando el voto femenino y la figura alegórica de Libertas, con porte digno, llevando la antorcha, como el nombre original de la estatua, la libertad iluminando el mundo3. A diferencia de la estatua de Nueva York no porta en la mano izquierda la “tábula ansata” con la fecha 4 de julio de 1776, fecha del acta de independencia4.  El cabello negro rizado va anudado en una cinta blanca. Muestra un gesto de seguridad en las facciones de Libertas.
      En un tercer plano, se abre una especie de precipicio, infierno, caverna o cárcel en el que se encuentran las mujeres que no tienen el voto. Las mujeres son representadas en dos colores, negro y dorado, y se agitan y llaman a la libertad para que les ilumine con su llama. No visten con harapos, es más, parece que representan a una mujer adelantada, de clase media, es posible que blanca, y que lleve la lucha por el voto en la costa este. Casi todas las mujeres llevan el pelo recogido o escasamente largo.
      La imagen de la diosa Libertas es presentada en un tamaño superior, indicativo de la fuerza que el autor quiere presentar en el movimiento. La acción se desarrolla de izquierda a derecha puesto que los estados con aprobación del sufragio femenino están en el oeste del país.
       La escena se desarrolla sobre el suelo del mapa político americano, Canadá está cubierto por la bruma y, al sur, México, como país, no existe para el autor. Autor que es abajo firmante como Hy Mayer.
     Varios textos aluden al pie del mapa al tema representado:
      Exhortan a las mujeres a ir siempre hacia delante, a olvidar el odio, la amargura y los sinsabores de la lucha, que la noche trae sus ataduras, pero con la llegada del día (ojo a la relación día e iluminación de libertad), tras esa libertad, no deben recordar nada más que un ruego, olvidar el rencor.
      Y tener en el recuerdo a quienes lucharon, a las mujeres que les dieron esperanza en momentos de derrota, asociándolas al amor materno. Reclamar a mujeres de diferente condición a unirse en el esfuerzo por conseguir sus derechos, apelando al corazón y a las lecciones de madres y mujeres preparadas para que ninguna sea extraña a este movimiento. (Alice Duer Miller5).
      La revista Puck se publicó entre 1876 y 1918. Fue fundada por Joseph Kepler6 como semanario de humor donde publicaba sus caricaturas y en la que también colaboraron otros caricaturistas como Henry Hy Mayer. El 20 de febrero de 1915, Mayer, publicó en la citada revista The awakening. Según la Universidad de Cornell7, donde se encuentra esta ilustración dentro de la colección Persuasive Maps8 de PJ Mode, Henry Hy Mayer había nacido en Alemania, 1868-1954, y era el ilustrador principal de la revista Puck (disco). Apareció durante la campaña Empire State, un referéndum disputado sobre el derecho al voto femenino en el estado de Nueva York, campaña que tuvo un fuerte impacto en la historia del sufragio femenino y que, hoy en día, sigue siendo un icono de esta lucha, con influencias en la cultura popular, como la venta de accesorios alusivos a esta lucha cien años después9. El referéndum no consiguió en esta ocasión el derecho al voto femenino, pero dos años más tarde tuvo éxito, el 6 de noviembre, y en su centenario en 2017, entre los actos conmemorativos, tuvo lugar una exposición que recorre las décadas de lucha por el voto femenino10 . Según recogía el canal de noticias en español Univisión11con referencias, también, de EFE, la muestra recogía el activismo político de las neoyorkinas, sus luchas por poder votar y las figuras más representativas de estos movimientos.
      Henry ‘Hy’ Mayer fue prolífico ilustrador, cineasta, productor, director, animador y autor intelectual de muchas películas populares tanto animadas como en vivo realizadas durante la época de cine mudo. Rápidamente se consolidó como uno de los mejores ilustradores de revistas, desde ilustraciones de páginas completas a secciones parciales en la que se comentaba temas sociales o de actualidad diaria. A partir de 1913 dio el salto a la animación en la que muestra las ideas que conscientemente publicaba en sus ilustraciones12. Mayer fallece en 1954.
      Está ilustración se publica en la revista ‘Puck’, durante la campaña Empire State que propugna, mediante referéndum, en 1915, el voto femenino. La historia del sufragio femenino tiene una serie de etapas según María Estela Báez-Villaseñor13, que junto a la colonización del Oeste favoreció las aspiraciones políticas femeninas. De hecho, como observamos en la ilustración del mapa, los estados en los que había voto femenino eran todos de esa zona geográfica. La colonización del Oeste estaba vinculada, según esta autora, a la evolución de la doctrina liberal y coadyuvó a la conquista del voto. Un valor importante en esta doctrina fue la igualdad, y en la lucha por conseguir la igualdad las mujeres se aliaron, ocasionalmente, con los abolicionistas y activistas que luego después de la abolición demandarían la decimoquinta enmienda que se creía que beneficiaría a libertos y mujeres,  y por la que se otorgaba el voto a los varones negros en edad de ejercer este derecho.
      El sufragio femenino se consiguió con la decimonovena enmienda en 1920. Hemos señalado que Báez-Villaseñor señala tres etapas en la lucha por el voto femenino: Primera, desde la declaración de independencia hasta mediados del siglo XIX con la declaración de Seneca Falls de 1848. Una segunda etapa iría desde los momentos previos a la Guerra Civil (1860-1865) hasta 1877 con el fin de la Reconstrucción con el surgimiento de las primeras entidades en el Oeste donde pudieron votar las mujeres. Y la tercera etapa llega hasta la aprobación de la decimonovena enmienda, en 1920.
      A principios del siglo XX, las sufragistas encaminaron sus esfuerzos a conseguir el voto y a forzar un cambio en la Constitución estadounidense. En 1917 dieciséis estados ya tenían derecho a voto14.
      En la primera etapa señalada, con el proceso de independencia de 1776, no se produjo ninguna mejoría en las circunstancias políticas de la mujer pese a los cambios de la institución familiar y a la participación de la mujer en la industrialización. La constitución federal ratificada en 1789 dio amplía maniobrabilidad a los estados que legislaron de forma particular pero no sobre esta materia que era demasiado avanzada para la época15. Según Carlos Malamud, en Pennsylvania se impuso algo parecido al sufragio universal, aunque las mujeres no podían votar16.
     En 1848 tuvo lugar la declaración de Seneca Falls. La declaración de derechos fue un paso previo a la lucha por el sufragio. Según Alicia Miyares17, fue la primera convención sobre los derechos de la mujer en Estados Unidos. Fue organizada por Lucrecia Mott y Elizabeth Cady Stanton. Se basa en la Declaración de Independencia de los Estados Unidos en la que se denunciaban las restricciones políticas a las que estaban sometidas las mujeres: sin derecho a voto, no se podían presentar a las elecciones, ni ocupar cargos públicos, ni afiliarse a organizaciones políticas o asistir a reuniones políticas. Para Miyares 1848 es una fecha señalada porque coincide esta declaración con el Manifiesto Comunista18. Las mujeres habían tomado ya parte activa en el primer congreso antiesclavista femenino de Nueva York, en 1837, con la recogida de firmas y peticiones abolicionistas. El derecho a la abolición fue reclamación previa a la petición de derechos para las mujeres y, consecuencia de la lucha por la abolición, fue la lucha por el sufragio femenino.
     Fueron también muy activas en la lucha contra el alcoholismo, pero en principio la lucha por el voto no era una prioridad; era más importante la lucha por otros derechos como el derecho a la propiedad femenina, el divorcio y el aumento en oportunidades de empleo y educación. De hecho, antes de la Guerra Civil, el impacto del movimiento sufragista era menor.
      Durante el período de la Reconstrucción, 1865-1877, se aprobó la decimotercera enmienda que declaraba ilegal la esclavitud por motivos raciales. Los años de la Reconstrucción favorecieron el reconocimiento de los derechos de las mujeres en el Oeste por la flexibilidad de las instituciones, porque eran un elemento estabilizador; y  porque tuvieron acceso a la propiedad y a los negocios con menos trabas que en el Este. Por otra parte, la necesidad de mujeres jóvenes auspició una legislación que hiciera atractivo establecerse en los nuevos territorios, y el hecho de tener el acceso a la propiedad, tener un negocio, ser contribuyente por ello, llevaba aparejado la obtención de derechos políticos.
      En 1869, en Wyoming, se les otorgó a las mujeres el derecho al voto y a ocupar puestos públicos. Una herramienta importante para la difusión de las demandas de las mujeres fue el periódico New Northwest, fundado por Abigail Scott Dunaway en 1871 en Portland, Oregon. A Wyoming le sucedió Utah, en febrero de 1870, dentro de una estrategia para eludir la intromisión del gobierno federal en los asuntos estatales por los casos de matrimonio polígamo entre mormones. Aunque la estrategia política falló y produjo la revocación del sufragio femenino, este volvió a aprobarse en 1896 cuando la Constitución de Utah fue aprobada e ingresó en la Unión Americana. Colorado en 1893, Idaho en 1896 también lo incluyeron en sus constituciones. A la condición embrionaria de estas sociedades y a la escasez de mujeres se unió que sus demandas no contradecían ideas liberales. Otro factor influyente fue la competencia entre partidos cuyas fuerzas en estos estados estaban muy equilibradas.
      En la última etapa, finales del siglo XIX y principios del XX, la oposición al sufragio femenino persistía por sectores conformados por las propias mujeres. Para defender el voto femenino se argumentó que favorecería el bien de la nación y frenaba el ascendente poder de la influencia extranjera.
      El activismo femenino fue importante en el movimiento progresista a principios del siglo XX, que incluía, sin cohesión ni igual consideración, a mujeres blancas de clase media-alta, a reformistas afroamericanas, y algunas mujeres de la clase trabajadora. El proceso de colonización se consideraba acabado y el discurso sufragista iba dirigido a la participación en el proyecto nacional y a su representación poblacional. Con la participación femenina en la 1ª Guerra Mundial se hizo muy difícil negar el derecho de sufragio. Además, en los estados del oeste donde se había aprobado el voto femenino, los efectos no habían ocasionado cambios que afectasen a la vida de los hombres. Dejo de ser algo radical para convertirse en garantía de la estabilidad institucional.
      Durante la Primera Guerra Mundial, la participación femenina en el esfuerzo bélico fue de gran transcendencia, adquiriendo rango de patriotas,  y el Congreso americano, a pesar de las reticencias de los estados sureños, en 1919 anunció la decimonovena enmienda que otorgaba a las mujeres el derecho al sufragio. Entonces trece de los dieciséis estados del oeste ya lo tenían, y en el Este Nueva York y Michigan. Esta legislación no fortaleció el movimiento de defensa de derechos de las mujeres, al contrario, lo fragmentó en el aspecto racial, ideológico, generacional o de clase.19

      Henry Hy Mayer estableció varias perspectivas y disposiciones en el mapa persuasivo del sufragio femenino. Utilizaba formas clásicas y acabadas para la estatua de la libertad que guía a las mujeres con su antorcha en la lucha por el sufragio, con tonos dorados brillantes, con los estados del oeste consolidando el camino por el que transita, y las figuras de las mujeres del este que claman por el derecho al voto aparecen, sin embargo, en zona de penumbra, los dorados se entremezclan con negros como claroscuros, sin tonalidad distinta en la piel, sin vida. Intentando salir del suelo, del foso, de la caverna. Despertar.

      La utilización de una cartografía persuasiva a principios del siglo XX era un arma de propaganda muy utilizada como reclamo político en distintas campañas incisivas en distintos temas y momentos.
     El despertar, the awakening, alude a la lucha femenina por el sufragio. Es una lucha que recuerda al despertar de las conciencias del mito de la caverna de Platón sobre la sabiduría o conocimiento; cómo las mujeres que están en ese infierno o Hades intentan salir, claman por salir, iluminadas por la antorcha de la vida de Libertad.
      Puede que, para esa fecha, el autor, ya conociera la alegoría del uso del amarillo o el dorado en El maravilloso mago de Oz de Lyman Franz Baum. En esta obra, el camino de baldosas amarillas y el mismo Oz, simboliza el oro y el patrón oro. Visualmente lo apreciamos en la maravillosa película de 1939 dirigida por Victor Fleming. Habría que investigar las posibles conexiones entre el voto en los estados del Oeste, la expansión económica que supuso la colonización de esos estados en el siglo XIX y la influencia que tuvo en el imaginario de la época la fiebre del oro en estados como California20.
      Es un mapa persuasivo, propagandístico, movilizador. El icono que supuso la Estatua de la Libertad en el centenario de la Independencia, o la visión que, desde algunas perspectivas, había de la misma21 en 1916. Las mujeres que esperaban el derecho al voto, en el mapa, no tienen color en la piel. Son claroscuros de dorado. Cuando consigan el derecho al sufragio tendrá, probablemente, categoría humana con el color de la piel de la estatua, que con aire majestuoso camina hacia el Este, como una heroína moderna, en busca de las mujeres que claman, para guiarles camino de la liberación, buscando su luz, buscando su energía.
      Poco importaba que el referéndum fracasara, poco importaba no conseguir el voto. La participación de la mujer en el esfuerzo bélico de la guerra mundial iba a dejar sin argumentos a la mayoría de los ciudadanos americanos y a la mayoría de sus representantes políticos. Su comportamiento patriótico en diferentes frentes hacia contradictorio negarles el derecho. A pesar de las reticencias de los estados del sur por el acceso de la mujer afroamericana al voto, estas campañas, tan potentes, dejaron el camino abierto hacia la consecución de más derechos femeninos.
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1 Rubio Jiménez, C. El lenguaje visual de los colores. Historia, cultura y problemas en la traducción ideomática de los colores. TFG tutelado por Lourdes Cerrillo Rubio y Esther Fraile Vicente. 2015. Facultad de Traducción e Interpretación de la Universidad de Valladolid, Grado de traducción e Interpretación.: El amarillo tiene connotaciones negativas frente al dorado que las poseé positivas. Página 21-22.

2 Voto para las mujeres. Traducido de traductor google.

3 https://www.laestatuadelalibertad.com/

4 Vidal Galache, F.: “La revolución norteamericana” en Lario, A.(coord.): Historia Contemporánea Universal. Del surgimiento del estado contemporáneo a la primera guerra mundial. Alianza Editorial. Madrid. 2010. Página 61.

5 Alice Duer Miller: (1874-1942), poeta, novelista influyente entre sufragistas americanas. https://aliceduermiller.com

7 Ithaca, Nueva York, 1865, https://www.cornell.edu/

9 https://www.redbubble.com/es/people/aapshop/works/20877460-historia-feminismo-de-estados-unidos-1915-votos-para-mujeres?p=scarf

13 BÁEZ-VILLASEÑOR, M. E.: Un largo camino: la lucha por el sufragio femenino en Estados Unidos. Signos históricos núm. 24, julio-diciembre 2010, páginas 88-119.

14 JUAN RUBIO, A. D.: La mujer en el Congreso estadounidense: el c aso de Edith Nourse Rogers, 1925-1960. Tesis doctoral, Facultad de Filología, UNED, 2015, dirigida por Dra. Antonia Sagredo Santos. Páginas 51-53.

15 BÁEZ-VILLASEÑOR, M. E.: Obra citada, página 91.

16 MALAMUD, C.: Historia de América. 2013, 3ª reimpresión, Madrid, Alianza Editorial. Página 275.

17 MIYARES, A.: 1848: El manifiesto de ‘Seneca Falls’, Revista Leviatan, Num. 75, Primavera 1999, Madrid, páginas 135-158.

18 MARX, C. y ENGELS, F.: Manifiesto del partido comunista. 1848.

19 BÁEZ-VILLASEÑOR, M. E.: Obra citada, páginas 91-116.

#Rescatada #Superviviente #Heroínas

El Torreón de Moratalaz
URGENTE

 
      Lucía Cálamo (Corresponsal). 5 de marzo de 2020.
      En medio de la niebla matutina, Escolástica Murillo Jerez, paseaba con intención de comprar pan para hacer unas migas cuando encontró un papel traído por un suave y gélido viento. En la avisadora hoja se podía apreciar unas letras escritas con tinta sangre:
                 
                           AYUDA ENCERRADA FINCA SABINA

     
     Alterada, preocupada, con rapidez, marcó el 016. Un dispositivo coordinado por la capitana de la Guardia Civil Lina Brequero, del destacamento de Azuerina, estableció una búsqueda desesperada, en la que colaboró la niebla, que, de inmediato, levantó. Al caer la noche, el operativo dio resultado con la liberación de la raptada y la captura de sus secuestradores. Cuando la mujer estuvo a salvo, la luna llena brilló en el firmamento.
      Los detenidos serán interrogados en las dependencias del cuartel durante setenta y dos horas hasta pasar a disposición de los juzgados de la comarca. Se les puede acusar a los detenidos de detención ilegal, trata de blancas y agresión sexual.
      Cuando pasen a disposición judicial, el pan blanco de cruz estará en óptimas condiciones para elaborar unas migas con tocino y chorizo en honor de la liberada. A la comida, organizada por la asociación H.C.U.M. (Hoy Come Una Más), se ha invitado tanto a la rescatada como a sus rescatadoras. El ayuntamiento de Azuerina impondrá la insignia de la ciudad a Escolástica y a la capitana Brequero por su comportamiento ejemplar. La mujer liberada se encuentra atendida en los servicios sanitarios locales. Es una superviviente.
     

  

Evocaciones de los diseños dorados de Manuel Piña

            Museo Manuel Piña     En el Museo Manuel Piña ( @museosdemanzanares ) hay unos diseños de color amarillo, dorado y áureo, que re...