Cultura y sociedad

Mostrando entradas con la etiqueta Marqués de la Vega-Inclán. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta Marqués de la Vega-Inclán. Mostrar todas las entradas

El marqués de la Vega-Inclán

     

Marqués de la Vega-Inclán, Sorolla, Wikimedia



      En mayo de 1925, Alberto Jiménez Fraud escribió a María de Maeztu para comunicarle, ya que no le cogía el teléfono, que el marqués de la Vega-Inclán iba a inaugurar el 30 de mayo en Sevilla la Residencia de América, una especie de club norteamericano con vistas al turismo de ese país. En el acto se iba a descubrir una lápida de Washington Irving. El marqués quería invitar a las norteamericanas que se alojaban en la Residencia de Señoritas que dirigía Maeztu. Habría tres días de bailes, cruces de mayo, cabalgatas, etc. 


Titular ABC, 16 de junio de 1925



     La inauguración se pospuso hasta el 15 de junio de 1925. La noticia fue recogida por ABC al día siguiente. Vega-Inclán era el comisario regio de Turismo. En ese acto, se llevó a cabo el descubrimiento de una lápida dedicada a al norteamericano que daría nombre a la Residencia de América, Washington Irving.

     Al acto asistieron el infante Don Carlos, en representación del rey Alfonso XIII; el embajador de los Estados Unidos, Mr. Moore; el presidente de la Agencia Cooperativa periodística de Nueva York, Mr. Berry; todos los norteamericanos que se encontraban en Sevilla; las autoridades locales; representaciones de los Centros universitarios y docentes, Sociedades culturales, Academias de Buenas Letras, Bellas Artes y de la Historia, el director del Archivo de Indias; el comisario regio de la Exposición Iberoamericana, conde de Colombí; el exministro señor Cañal; concejales, diputados provinciales y otras distinguidas personalidades del momento.

      La Residencia y el pintoresco Callejón del Agua fueron engalanados con las banderas de Estados Unidos y España. En su discurso, el marqués de la Vega-Inclán explicó la razón de la creación de la Residencia, enalteció al escritor al que se levantaba la lápida, alabó a los representantes del Gobierno norteamericano y dedicó unas palabras de agradecimiento a la familia real.

     La lápida fue descubierta por el alcalde que glosó al Irving por su escritura y la labor de divulgación de la cultura española. Correspondió el embajador con elogios a nuestra cultura y a la reina que vendió sus joyas a finales del siglo XV, recordando la época de los descubrimientos. Terminó su discurso dando vivas a España, al rey y a Sevilla. Con las palabras del infante de España en representación del rey y la visita a las instalaciones culminaron las intervenciones. De nuevo, se repitieron las alabanzas a Washington Irving y los mejores deseos de estrechar los lazos de unión con Estados Unidos.

     El marqués de la Vega-Inclán fue el artífice de los éxitos de la Comisaría Regia del Turismo creada al 19 de junio de 1911. Trabajó con una visión europea y estadounidense. Fue un incansable viajero y su figura se inscribe en el regeneracionismo y la Institución Libre de Enseñanza. Fue amigo de Archer M. Huntington, Manuel Bartolomé Cossío, Joaquín Sorolla o Aureliano de Beruete. Destacó como experto en arte,  fue un marchante activo, y un reconocido especialista en los museos más importantes de Europa. Diseñó un programa de gestión turística para revitalizar la economía nacional. Promocionó un turismo de alto nivel para que España fuera conocida a nivel europeo. Se encontró con el obstáculo de la Primera Guerra Mundial, pero eso no le impidió divulgar la imagen de España, disponiendo lugares de recepción y emprendiendo variados proyectos culturales.

     Luchó por mejorar las infraestructuras de comunicación viaria y ferroviaria para que los turistas que entraban por los puertos del norte y el Mediterráneo encontrasen itinerarios por el interior, consiguieran la supresión o la fácil tramitación de los visados de viajeros, y una mejor fijación de tarifas de trenes especiales que transportaran a los viajeros a ciudades monumentales. Se había inaugurado la Casa del Greco y se puso énfasis en la carretera Madrid-Toledo. El Greco había sido redescubierto por su amigo Manuel B. Cossío en una monografía fundamental.

     La Residencia de América no tuvo la extensión de residencias que pretendía crear. Solamente fue esa. Pero Vega-Inclán está detrás de la creación de un nuevo tipo de hospedaje que relacionaría Turismo, conservación del Patrimonio artístico y el espinoso tema de la restauración. Estaba dirigido a una clase media que no fueran al Ritz o al Hotel Palace. El germen fue la Hospedería de Santa Cruz en Sevilla, iniciativa privada del marqués para la Exposición Iberoamericana de 1929. Rehabilitó unas casas a imagen de las características viviendas populares andaluzas: azulejería, encalados, patios, surtidores, etc., con el añadido de suministros de agua, luz, alcantarillado y pavimentación. Dio una nueva función a edificios abandonados. A la Hospedería de Santa Cruz seguiría el Parador Nacional de Gredos (1928), o el de Manzanares (1931) o Mérida (1933). Fueron el origen de la posterior Red de Paradores Nacionales y Albergues de Carretera que se adaptaron a los estilos regionales y las necesidades de cada zona. Se eligieron edificios históricos, conventos y castillos para adaptarlos a la función hotelera con algunas variaciones. 

Albergues de Turismo hacia 1940. 


     Otro empeño fue la propaganda y publicidad con la difusión de la riqueza artística de España en Estados Unidos e Inglaterra. A ello contribuyó de manera especial Archer M. Huntington y su fundación Hispanic Society, con exposiciones celebradas en Nueva York y Filadelfia con la denominación Obras de Turismo en España. Se comenzaron a abrir oficinas de Turismo en el exterior con anuncios de Sunny Spain para la Exposición de Londres de 1914, ideas que habían germinado en el V Congreso Internacional de Turismo de 1912. Se editaron publicaciones con el nombre El arte en España en formato de bolsillo, que fueron redactadas por historiadores relevantes del momento, dedicadas a ciudades monumentales, edificios destacables o pintores como Velázquez o Goya. Y sin olvidar los itinerarios y excursiones populares para conocimiento de los posibles visitantes.

     La conservación y rehabilitación de monumento fue otro de los puntales de trabajo. La reparación de tramos de la muralla de Ávila, los edificios religiosos de Navarra como el monasterio de Leyre, el Alcázar de Sevilla, la conservación de la Alhambra y el Generalife. En Valladolid se estableció la Institución Cervantina. 

     Se intervino la toledana Sinagoga del Tránsito, la casa de El Greco, futuro museo, y germen de una serie de museos como el del Romanticismo. Fue un revalorizador de la historia y cultura española.

     Hoy su figura está siendo historiográficamente revisada. Fue un pionero ligado a la gestión y la cultura que utilizó métodos de conservación y restauración cuestionables. Asimiló el estilo español o andaluz a una construcción idealizada o artificial, con tintes folclóricos o pintorescos, de pura incitación a la visita de turistas. Algunas de las rehabilitaciones de edificios históricos como nuevos paradores se hicieron sin el debido rigor. Y como fue marchante, hubo algunas salidas de obras de arte español al extranjero para obtener recursos para proyectos de la Comisaría. No existía una conciencia de salvaguarda apropiada de los bienes culturales tal y como se concibe en la actualidad.

      Lo cual no empece para reconocer su carácter pionero que enlaza turismo y patrimonio. Y lo cultural con lo natural. 

     Con temor a olvidar algún museo, Vega-Inclán está en el origen del Museo Nacional del Greco, 1911; la conversión de unas casas de Valladolid en Museo Casa de Cervantes, en una de las cuales vivió el escritor hasta principios de 1606; el Museo del Romanticismo, en 1924; y el Museo Sefardí, que, como se ha citado, se relaciona con la restauración de la Sinagoga del Tránsito, aunque no se fundara hasta 1964.


Museo Casa de Cervantes, Valladolid, bmre.








     -----     -----     -----
     Bibliografía consultada:

      - JIMÉNEZ FRAUD, A.: Epistolario. Edición: VALENDER, J., GARCÍA-VELASCO, J., AGUILAR-ÁLVAREZ, T., ARROYO, T. Fundación Unicaja y Residencia de Estudiantes. Madrid. 2018. Leído en Archivo Museo Sánchez Mejías, 16-22 de octubre de 2025. La carta no tiene fecha y los editores la ubican antes del 30 de mayo de 1925 por la lógica comprensión del escrito, al citar la fecha prevista de inauguración, que después se atrasó al 15 de junio.

      - ABC, 16 de junio de 1925. Página 14.

      - GARCÍA, M.ª V., SOTO, V., MARTÍNEZ, J.: El estudio del Patrimonio Cultural. Editorial Universitaria Ramón Areces, Madrid, 2017. Páginas 142-153.

      - Archivo personal del Curso de Museología y Museografía de UNED-FUNDACIÓN UNED, Madrid, 2017. Varios autores, coord. por Fernando Adam Fresno.

      

      30-10-2025 18:21 Actualizado 31-10-25 17:24

El marqués de la Vega-Inclán

      Marqués de la Vega-Inclán, Sorolla, Wikimedia       En mayo de 1925, Alberto Jiménez Fraud escribió a María de Maeztu para comunicar...