Desde ayer, vigila los colegios electorales La Policía Armada protege las urnas
MADRID, 6 (D16). - La Policía Armada protege, desde las ocho horas de la tarde de ayer, todos los colegios electorales de Madrid, en previsión de cualquier atentado que pudiera alterar durante el día de hoy el normal desarrollo del referéndum constitucional.
El denominado Plan de Protección y Seguridad Permanente, puesto en marcha desde hace dos semanas, de cara al referéndum constitucional, comprende las fases de «atención», «alerta» y «alarma».
La operación, estructurada por los Estados Mayores de las Fuerzas Armadas, implica tanto a las propias FFAA como a las fuerzas de Orden Público, Ideada para diversos supuestos, su primera aplicación tuvo lugar con ocasión de las elecciones del 15 de junio del pasado año.
Fase de «alerta»
- El día 27 de noviembre concluyó la fase de «atención» y se inició la de «alerta» en todo el territorio nacional, excepto en el País Vasco y Navarra, donde en aquella fecha se puso en marcha la última fase del Plan -la de «alarma»-, desarrollada enteramente por Fuerzas de Orden Público, con un total de unas diez mil personas, entre miembros del Cuerpo General de Policía Armada y Guardia Civil. El Plan, que tiene prevista la intensificación de la vigilancia
en todas las instalaciones públicas consideradas de capital importancia para la vida social del país, así como centros oficiales, concluirá el domingo.
La seguridad en los colegios electorales de Madrid quedará garantizada con la vigilancia que, desde las ocho de la tarde de ayer, llevan a cabo efectivos de la Policía Armada.
En San Sebastián, todos los agentes de la Policía Municipal estarán de servicio permanente desde las seis de la mañana de hoy hasta las diez de esta noche. Setenta policías municipales prestarán servicio en 194 mesas electorales de la
capital donostiarra.
A este fin, una circular de la inspección General de la Policía Armada dio órdenes oportunas para que votaran por correo, en previsión de que hoy casi la totalidad de los efectivos policiales estarán de servicio.
SEBASTIÁN GARCÍA
La consecución de un régimen de libertades para España ha sido, desde el comienzo de la dictadura, el objetivo primero de Simón Sánchez Montero. Para este viejo dirigente comunista, al que su especial sentido de la política ha hecho pasar intocado por todos los avalares del PCE, y que fue perseguido y encarcelado repetidamente por el franquismo, aprobar la Constitución significa, ante todo, conseguir ese régimen de libertades.
Pregunta. ¿Qué significa para un dirigente comunista, con su historia de clandestinidad y prisión política, aprobar una Constitución en España, en 1978?
Respuesta. Para mí supone un aspecto muy importante en la culminación de algo por lo que he luchado toda mi vida. Es decir, un hito fundamental en el establecimiento de un régimen de libertades políticas en nuestro país, objetivo al que ha estado orientada toda mi actividad como comunista desde 1939. No porque mi ambición como comunista y como miembro del PCE se limitara a eso, sino porque la posibilidad de desarrollo de las fuerzas democráticas y obreras y la marcha hacia el socialismo y el comunismo, que es nuestro objetivo último, tenía
como condición imprescindible establecer ese régimen, porque sólo dentro de la libertad y la democracia, desarrollándolas y profundizándolas en todos los aspectos de la vida política, económica, social, etcétera, se pueden ir realizando las transformaciones de todo tipo que permitan llegar a la sociedad socialista.
P. En concreto, ¿qué supone para un comunista español de hoy aprobar una Constitución que establece, por ejemplo, la Monarquía parlamentaría?
R. Que en el hecho constitucional figuren aspectos como éste no disminuye en absoluto nuestra apreciación de que esta Constitución es la que corresponde a la democracia española en este momento, y en consecuencia nuestro si rotundo a la misma y el consejo de que se vote masivamente en favor de ella.
En cuanto a la Monarquía parlamentaria, y quiero subrayar lo de parlamentaria, a lo largo de toda la dictadura, desde el final de la guerra, el PCE ha hecho hincapié en la necesidad de establecer un régimen democrático, más que en el hecho de que fuera monárquico o republicano. Desde el momento de su legalización en abril de 1977, el partido ha dicho que aceptará la Monarquía mientras ésta sea un factor positivo para el desarrollo de la democracia en nuestro país. La realidad política de la España de hoy demuestra que la Monarquía, el Rey, es un factor importantísimo en la consolidación de la democracia en España. Por eso, sin haber renunciado a nuestros ideales republicanos, aceptaremos plenamente la Monarquía, mientras siga cumpliendo como hoy un papel muy positivo para la
democracia.
P. ¿Y la economía de mercado?
R. España es un país capitalista, y la Constitución tiene que reflejar esa realidad y proteger, en consecuencia, la propiedad privada, la economía de mercado, etcétera. Pretender lo contrario sería una utopia, y con utopías no se puede hacer política.
Pero al mismo tiempo, la Constitución establece el carácter social de la propiedad, y deja abierta la posibilidad legal, constitucional, de que en el futuro un Gobierno de izquierdas pueda realizar profundas transformaciones económicas y sociales que nos acerquen al socialismo.
P. También se constitucionaliza la Iglesia católica.
R. En este punto, la Constitución sienta las bases para dar una solución justa a un problema secular de España, el de las relaciones Iglesia Estado, sobre la base de la libertad de conciencia, el respeto a todas las creencias, incluidos los ciudadanos no creyentes, y garantiza la libertad de cultos. La mención a la Iglesia católica recoge una realidad que existe en España, pero no supone en absoluto privilegio ni ningún tipo de confesionalidad del Estado.
REFERENDUM
LOS REYES, ACLAMADOS AL ACUDIR A VOTAR
Madrid. (De nuestra Redacción.) Sus Majestades los Reyes de España acudieron a votar a las once y veinticuatro minutos de la mañana, al colegio de San Fernando, de El Pardo, donde, desde media hora antes, eran esperados por el ministro del Interior, señor Martin Villa, y el gobernador civil de Madrid, señor Rosón, quienes les recibieron y saludaron cordlalmente, entre los vítores y aclamaciones de un nutrido grupo de votantes que se encontraban en aquel momento en el colegio y que, al reconocer a los Reyes les tributaron un
espontáneo y expresivo homenaje de afecto.
Don Juan Carlos figura en el Censo electoral con el número 130 de su Sección, con residencia en el Palacio de la Zarzuela, y en la casilla reservada a la profesión se indica únicamente «Administración Pública». La Reina, que está inscrita con el número 449, tiene expresada como profesión «sus labores», como la mayoría de las amas de casa españolas.
La mesa donde votaron los Reyes estaba presidida por un joven de veinticinco años, don Emilio Lula Carrels Madrigal, al que el Rey entregó su sobre -con la papeleta del voto- cerrado y doblado por la mitad. Lo mismo hizo, inmediatamente después, la Reina, y una vez entregados sus votos los Monarcas se despidieron de todos los componentes de la mesa, estrechándoles la mano.
Los señores Martín Villa y Rosón les acompañaron hasta el automóvil, que conducía personalmente Don Juan Carlos, y en el recorrido por los pasillos del colegio -adornados con numerosos dibujos de los alumnos-, asi como en el exterior, los Reyes saludaron a los votantes que les aclamaban, estrechando la mano de muchos de ellos. El Rey vestía traje oscuro y gabardina y la Reina, que también llevaba un vestido de tono oscuro, se cubría con un paraguas, porque a aquella hora llovia.
El momento en que los Reyes depositaron su voto fue recogido por numerosos
redactores gráficos y cámaras de TV y de noticiarios cinematográficos de
diferentes países.
SUAREZ: «Anunciaré mi decisión sobre la investidura en el momento oportuno»
- SUAREZ: «Anunciaré mi decisión cuando tenga capacidad legal para hacerlo»
El presidente del Gobierno, don Adolfo Suárez, acudió a votar en compañía de su esposa, doña Amparo Illana de Suárez, al colegio electoral situado en el centro docente Andrés Manjón, en la calle de Francos Rodríguez. Eran las diez de la mañana. El momento del voto del matrimonio fue recogido también por numerosas cámaras fotográficas. Los informadores rodearon el presidente y le preguntaron por el tema que, en estos momentos, centra la atención de los medios políticos: la Investidura.
-¿Les parecería serio y responsable -replicó el señor Suárez- que yo anunciara mi decisión al respecto antes de tener la capacidad legal necesaria para ello? La Constitución dice que debo hacerlo «bajo mi exclusiva responsabilidad». Lo lógico es que tenga en cuenta todos los elementos de juicio que han de producirse desde hoy hasta que la Constitución entre en vigor. En el momento oportuno anunciaré a todos los españoles la decisión que he de tomar como presidente, porque ésa es mi obligación.
Expresó su confianza en que el pueblo español responderá afirmativamente a la consulta sobre la Constitución y se mostró optimista respecto a la etapa que ahora empieza en España. Los votantes, que, en número no muy elevado, se encontraban en esos momentos en el colegio electoral, aplaudieron al presidente del Gobierno y a su esposa, al abandonar éstos el aula donde votaron.
- HERNÁNDEZ GIL: «Deseo la más completa paz ciudadana»
En el grupo escolar Portugal, de la calle Víctor Pradera, 20, votó, a las diez y diez de la mañana, el presidente de las Cortes, don Antonio Hernández Gil, que llegó acompañado de su esposa. Al ser interrogado por los periodistas manifestó:
-Mi deseo, en este momento, es que esta jornada, iniciada con tanta ilusión, transcurra en la más completa paz ciudadana, para que todos los españoles con derecho a ello puedan depositar su voto.
- GUTIERREZ MELLADO: «La Constitución es algo bueno»
A las diez menos cuarto de la mañana, y en el colegio nacional situado en el número 10 de la calle Evaristo San Miguel, depositó su voto el vicepresidente primero del Gobierno y ministro de Defensa, teniente general Gutiérrez Mellado, que, al ser preguntado por informadores, manifestó:
-Ya saben ustedes que yo opino poco sobre temas políticos, pero yo veo que la Constitución es algo muy bueno. En cuanto a si satisface plenamente a los españoles, son ellos los que lo van a decidir hoy, votando «si» o «no».
- ALVAREZ DE MIRANDA: «Un no masivo sería preocupante»
El presidente del Congreso de los Diputados, don Fernando Alvarez de Miranda, votó, poco después de las diez y media, en el colegio Juan Valdés. Manifestó a los periodistas que el «6 de diciembre quedará registrado como un día trascendental en el proceso democratizador de España, ya que el pueblo español ha tenido la oportunidad de decir si se ha acertado, realmente, en e! camino de la reconciliación y la concordia.» Dijo también que un «no» masivo o muy elevado seria «preocupante».
- FONTAN: «Se abre una nueva época»
El presidente del Senado, don Antonio Fontán, acudió a depositar su voto, a media mañana, en un colegio del distrito de Chamberí. Tras expresar su convencimiento de que la Constitución iba a recibir un voto afirmativo mayoritarlo dijo:
-Con la aprobación de la Constitución se abre una nueva época para los
españoles, que han demostrado una clara vocación de convivencia y entendimiento.
- LOS MINISTROS:
- El ministro del Interior, don Rodolfo Martín Villa, llegó a votar a la una menos cuarto de la tarde, en el colegio San Juan de la Cruz. Le acompañaba el gobernador civil de Madrid, señor Rosón.
- El ministro de Trabajo, don Rafael Calvo Ortega, que votó también en el colegio Portugal, manifestó: «Me siento optimista. Creo que hoy va a ser un gran día.»
- En el colegio de Aravaca votó, a las doce menos cuarto, el ministro de Obras Públicas y Urbanismo, don Joaquín Garrigues Walker.
- Inmediatamente después de abrirse el colegio Andrés Manjón compareció a depositar su votó el ministro de Hacienda, don Francisco Fernández Ordóñez, acompañado por su esposa.
- «Pienso que, por primera vez, hay en la Constitución un claro reconocimiento al derecho a la cultura», dijo el ministro de Cultura, don Pío Cabanillas, tras emitir su voto en un colegio del barrio de Chamartín.
- El ministro de Sanidad y Seguridad Social, don Enrique Sánchez de León, manifestó, tras depositar su voto: «Confiemos» en que el pueblo español decida, definitiva mente, su futuro y que lo haga para un tiempo largo.»
- El ministro de Asuntos Exteriores, don Marcelino Oreja Aguirre, votó en el colegio del Pilar, a las nueve y cuarto, y no hizo declaraciones.

