"La libertad, Sancho, es uno de los más preciosos dones que a los hombres dieron los cielos;... por la libertad, así como por la honra, se puede y debe aventurar la vida”. (Miguel de Cervantes).

El elegante hombre del sombrero


      

     Siempre que miro esta foto de la generación del 27, la cual, recortada en tamaño grande, está en el Archivo Museo Sánchez Mejías, veo al frente al elegante hombre del sombrero. No, no están todos sus miembros. Por ejemplo, falta Gerardo Diego, quien fue una especie de fedatario de los jóvenes poetas.

     Gerardo Diego decía que para la historia no había pasado nada en 1927, que era un año como otro cualquiera. Lo utilizaba como recurso literario, puesto que, a continuación, proclamaba que para la historia de la poesía española era una fecha capital, porque diez o doce poetas tomaron forma sobre una fragua lenta. Y porque la poesía formaba parte de esa Historia al ser obra humana.

     La vindicación de Góngora se encuentra cerca de los noventa y siete años de aquella vez. Un proyecto temerario con visos de fracaso que triunfó. Góngora bendecido en el Olimpo de los grandes del siglo de Oro. Y un grupo de poetas que basaron parte de su relación en la amistad, por encima de filosofía o política. Diego dijo que la guerra les separó a la fuerza. Pero en cuanto fue posible recuperaron el contacto. Los exiliados, en algún caso, volvieron o viajaron a su país, como Altolaguirre o Guillén. Y los que quedaron en España, en cuanto pudieron viajar, lo hicieron, volviendo a retomar contactos.

     Tampoco aparece Cossío que conectó a muchos de ellos entre sí y con el mundo de la tauromaquia. Ni Cernuda, ni los jóvenes malagueños. Tampoco Moreno Villa, dibujado literariamente por Muñoz Molina en La noche de los tiempos como una persona olvidada en la Residencia de Estudiantes: "No me cuesta nada imaginarlo, a José Moreno Villa, acogido a la hospitalidad benévola de la Residencia de Estudiantes, con cerca de cincuenta años, casi siempre huésped secundario en las fotografías de otros, más célebres que él, siempre discreto en ellas, huidizo, formal, a veces ni siquiera identificado con su nombre...". 

     Tampoco vemos a Rafael Alberti, un ángel superviviente:

"Por un ave, tres anillos de oro

fueron hallados y enterrados en la escarcha.

La última voz de un hombre ensangrentó el viento. 

Todos los ángeles perdieron la vida.

Menos uno, herido, alicortado."

      Tan ligado a Sánchez Mejías, quien presenta una postura medida de todas las cosas; distinguida. Aunque se guarde las manos en los bolsillos, sobrado. Cubre su pronunciada calvicie con un sombrero ladeado, que le dota de un atractivo agradable, con una leve tripa, chaleco ajustado y americana abotonada en dos. Domina el espacio, con el abrigo abierto, sin frío, frente a sus compañeros. Un aquí estoy yo y mis compañeros poetas, que están helados. Encogidos, mirando a la cámara fotográfica, extasiados. Corpus Barga fuma un pitillo, estático, con sonrisa camino de la risa. Aleixandre, etéreo. Lorca atrás, demasiado atrás, aunque tal vez lo desee, porque se le distingue por encima de Dámaso Alonso, que tiene aspecto de mayor, como Salinas. Pero en este caso más, por su edad, dueño de la voz debida.

     Un Bergamín encogido y enjuto, siempre poliédrico. Regresó definitivamente a España en 1970, descubre que el gran prosista del 27 ya es un olvidado y se aísla en su azotea de la Plaza de Oriente. La última evolución de su vida se orienta hacia el mundo batasuno vasco, así fue enterrado en 1983, como oposición al mundo del consenso de la transición y aceptación monárquica. Francisco Umbral dijo que era un escritor republicano sin sitio. En 2016 la editorial Renacimiento reeditó El arte de birlibirloque, de 1930, prologado por Morante de la Puebla, con una nota introductoria donde recuerda que la definición estética de la tauromaquia propuesta se basa en Joselito y Belmonte, y recuerda más al amigo que al torero Ignacio Sánchez Mejías. A modo de sentencias senequistas, dice que "lo que no tiene inteligencia tiene carácter" o que "en el arte de Birlibirloque de torear, todo lo que no es suerte es trampa."

El 27. La generación de la amistad. Fullblock


_________________________  Versión 1

     Para saber más/Bibliografía:

     Antonio Muñoz Molina: La noche de los tiempos, 2009, Seix Barral. Novela que novela el amor en los tiempos de la II República, en medio del ambiente crepuscular republicano, con la Residencia de Estudiantes, o donde salen Bergamín, Alberti o Negrín. Hay una versión kindle.

     Gerardo Diego: Obras Completas, Tomo VIII. 19 de marzo de 2024 reseña de artículo de ABC de 9 de mayo de 1979 que recoge este tomo, sobre la conformación y espíritu del 27 literario. Archivo Museo Sánchez Mejías.

     Rafael Alberti: Cal y Canto. Sobre los Ángeles. Sermones y moradas. Losada. Buenos Aires. 1959. Página 121. Conseguí hace más de dos años una copia antigua de ese año. Hay una copia también de 1959 en Archivo Museo Sánchez Mejías.

     José Bergamín: El arte de birlibirloque. Renacimiento. Valencina de la Concepción. 2016. 

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